Sí, así es. Vuelvo a escribir, una vez más. Otra vez, a modo de explicación. Hace años que sé que debo leer El Principito. La pregunta de ¿cómo que no leíste El Principito? me la han hecho infinitas veces, en particular cuando disfruto mucho la lectura para chicos (o no tan chicos). A todos los que alguna vez me lo preguntaron, les contesto: ya empecé. Y, a priori, parece ser un libro maravilloso, con una cantidad increíble de citas para rescatar - y no estoy hablando de "lo escencial es invisible a los ojos", cita que estoy cansado de oir, y más cansado aún, de la gente que la utiliza.
En fin, van a encontrar unas cuantas entradas del libro en los próximos días. Espero que sepan entender.
